Carlos Calderón de la Barca

Carlos Calderón de la Barca fue desigando Director de Escena para la Comedia Nacional en 1947. Ocupó el cargo hasta 1949 en que falleció. En su designación pudo haber influido su conocimiento con Zavala Muniz, cuando dirigió la frustrada Comedia Nacional del SODRE de 1942, a quien estrenó Fausto Garay un caudillo. Había iniciado su carrera como apuntador, después se casó con la actriz Carmen Casnell. Calderón era conocido en el medio teatral uruguayo de los años treinta ya como director de la Compañía Casnell-Arrieta. Curotto lo recordaba como director de larga trayectoria en los escenarios rioplantenses.

Oscar Serra afirma en su trabajo (*I) que Justino Zavala Muniz y la primera comisión buscaron directores de prestigio en Buenos Aires que no aceptaron por la carencia de grandes figuras en el elenco.

Calderón dirigió casi la totalidad de las obras de autores uruguayos que ofreció la Comedia Nacional en sus primeros años:

Falleció cuando ensayaba la obra histórica La espada desnuda de Juan León Bengoa que terminó de poner en escena Carmen Casnell, su viuda. 
Resulta complejo evaluar la tarea de Carlos Calderón, cabe interrogarse si podría haber obtenido un mejor resultado que el que juzgaron los cronistas de esos años con el mediocre repertorio y con un elenco tan heterogéneo. Nacarina parece haber sido el primer éxito de la Comedia Nacional bajo su dirección. 
Con motivo de su muerte en noviembre de 1949 la Comisión de Teatros Municipales le rindió homenaje. César Farell destacaba la importancia de su colaboración eficiente ...en la época crítica de iniciación de la Comedia Nacional. (*II)

Testimonio de Alberto Candeau sobre Carlos Calderón:
De nacionalidad peruana, era un hombre muy práctico, de gran oficio, que se destacaba por ser un extraordinario apuntador, en la época en que se apuntaba desde la escotilla.
Siendo director, en los estrenos, con su compañía apuntaba él. (*III)

Antonio Larreta lo recordó como:
...un hombre gris, cansado, dócil a los dictados de los que realmente mandaban y que ponía poco más que su estrepitoso apellido al servicio de las ocho o diez obras que se estrenaron en dos meses, a razón de una semanal. (*IV)

Por su parte China Zorrilla:
Era un hombre como taciturno, poco brillante, que conocía su oficio, era eficaz en lo que hacía. Elegía títulos... No diré que tenía un gran brillo propio, no era un gran creador, pero un hombre idóneo con lo que hacía y respetado, y Carmen, su mujer era muy buena actriz. (*V)

(*I) Serra, Oscar, Gestión del Teatro Público en Uruguay. Comedia Nacional.Crónica del acontecer de su vida institucional. T1.1947-57, inédito, pag 52NOTAS

(*II) Acta CTM, nº64, 9 de noviembre 1949 

(*III) Candeau, Alberto, Cada noche es un estreno, Acali, 1980, Tomo I, pag 130.

(*IV) Larreta, Antonio, La vida breve, en 50 años COMEDIA NACIONAL, I.M.M., 1997, pag 27

(*V) Declaraciones a Mercedes Orticochea, agosto 2004.